Nuevos audios: La corrupción K(arina) está detonando la interna libertaria

En medio de una crisis que conmociona al oficialismo, la filtración de audios en los que el titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), Diego Spagnuolo, describe un presunto entramado de coimas en la compra de medicamentos, sacudió las más altas esferas del gobierno. Las grabaciones, que rápidamente se viralizaron, vinculan de manera directa a Karina Milei, hermana del presidente, y a los primos Martín y Eduardo “Lule” Menem con maniobras irregulares que habrían beneficiado a la Droguería Suizo Argentina, propiedad de la familia Kovalivker. La repercusión en redes sociales fue inmediata, con etiquetas como #KarinaCoimera y #3% liderando las tendencias nacionales, acompañada de memes, le coparon “la calle online” completamente abandonada por “Las Fuerzas del Cielo”.

Según la denuncia presentada por el abogado Alejandro Díaz Pascual, se habrían detectado “hechos de corrupción vinculados a contrataciones millonarias realizadas con omisión de procedimientos legales”. En uno de los pasajes más comprometedores del audio, una voz atribuida a Spagnuolo afirma: “Lule (Menem) está choreando de una manera… Él (por Milei) no está metido, pero es toda gente de él”. Además, detalla una operatoria donde supuestos porcentajes de las ganancias ilegales se repartirían, asegurando que “a la primera que se van a llevar presa es a Karina”. El periodista Tomás Méndez añadió que Spagnuolo habría recibido presiones de Eduardo “Lule” Menem para acelerar las contrataciones.

El escándalo reavivó las tensiones internas en el corazón del poder, exponiendo una guerra sorda entre facciones. Karina Milei, según publicó El Expreso de Salta, sospecha que detrás de la filtración se encuentra Santiago Caputo, el influyente asesor presidencial conocido como el “monje negro”, y su ejército de trolls. La convicción de Karina es tal que, de acuerdo con fuentes del oficialismo, ya le había prohibido a Caputo visitar al presidente en Olivos. La ira de los tuiteros oficialistas, muchos de ellos con contratos en empresas del Estado, se habría desatado al sentirse utilizados. “Nosotros ponemos la cara, salimos a defender y estos se están afanando todo”, afirmó uno de ellos, según las mismas fuentes.

Este conflicto se superpone a otras pugnas preexistentes dentro del gobierno. La interna entre Karina Milei y la ministra Sandra Pettovello ya era un secreto a voces. Pettovello incluso llegó a presentar su renuncia al presidente, quien la rechazó. Se reveló que la ministra de Capital Humano ya había impulsado una denuncia contra la misma droguería en agosto del año pasado, cuando sufría el acoso de la hermana del mandatario. “Sandra es de las pocas o quizá la única que Javier defiende de los ataques de Karina”, confió una dirigente libertaria. Esta situación coloca al presidente en un dilema político crucial: desprenderse de su ministra le significaría quedar aislado bajo el dominio de su hermana y los Menem, mientras que actuar contra estos últimos confirmaría la veracidad de los audios.

Frente a la magnitud del escándalo, llamó la atención el silencio estridente de las principales voces mediáticas libertarias. Figuras influyentes como el “Gordo Dan”, Agustín Romo y Lucas “Sagaz” Luna evitaron por completo referirse al tema en sus redes sociales y programas, optando por concentrarse en otros temas de la agenda legislativa. Esta omisión contrastó con la reacción de algunos usuarios libertarios de base, quienes expresaron su incomodidad y apuntaron sus críticas hacia Karina Milei, aunque manteniendo su apoyo al presidente. La falta de una explicación oficial contrasta con la celeridad que días atrás tuvo la propia Karina para desmentir públicamente el valor de un reloj, una velocidad de respuesta que brilló por su ausencia en este caso.