El principal desafío de Kicillof es conseguir los dos tercios de los votos necesarios en la Legislatura bonaerense para aprobar el endeudamiento. Aunque ha logrado asegurar una mayoría simple para el presupuesto y la ley impositiva, la autorización para tomar más deuda sigue siendo incierta. El gobernador ha enfrentado críticas y presiones de diversos sectores, incluyendo intendentes peronistas que demandan más fondos para sus municipios.
La situación se complica aún más con la intervención de La Libertad Avanza, que ha influido en las negociaciones y ha generado más incertidumbre sobre el futuro del presupuesto. Kicillof y su equipo continúan trabajando para destrabar las negociaciones y lograr la aprobación completa del paquete legislativo antes de fin de año.
Desde la CGT mostraron su apoyo mediante un comunicado titulado “Presupuesto PBA: las provincias necesitan la aprobación de la Ley de Leyes”, en el que se pidió que se aprueben las iniciativas. “En momentos en que los gobiernos provinciales deben suplir las falencias de un Estado Nacional que se retira de sus obligaciones, los presupuestos locales son más necesarios que nunca”, fue el argumento presentado por la confederación.
🔴 PRESUPUESTO PBA: LAS PROVINCIAS NECESITAN LA APROBACIÓN DE LA LEY DE LEYES pic.twitter.com/qPo68YTUxo
— CGT (@cgtoficialok) December 24, 2024
Además, distintos intendentes peronistas que responden políticamente a Kicillof han salido a reclamar la aprobación del presupuesto, la ley fiscal impositiva y la autorización de endeudamiento. El presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Alexis Guerrera, ha señalado que los 37 diputados de Unión por la Patria están listos para votar, pero aún faltan los votos necesarios para el endeudamiento.
El futuro del presupuesto 2025 de la provincia de Buenos Aires sigue siendo incierto. La capacidad de Kicillof para manejar estas tensiones y conseguir los votos necesarios será crucial para su administración y para el desarrollo de la provincia en el próximo año.
