09 Jun 2025

Kicillof encabeza un acto del MDF en Quilmes

El gobernador hará plenario con la militancia de su espacio, mientras la mesa de diálogo con CFK intenta evitar la fractura electoral frente a la alianza sellada entre LLAy el PRO. Tras reunirse con Cristina, Kicillof desembarcará en municipio camporista de Mayra Mendoza.
Kicillof encabeza un acto del MDF en Quilmes

El gobernador Axel Kicillof desembarcará este miércoles en Quilmes, bastión del kirchnerismo duro, para encabezar un plenario de su Movimiento Derecho al Futuro (MDF) en plena tensión por la candidatura de Cristina Kirchner en la Tercera Sección Electoral. El acto en el municipio de la intendenta camporista Mayra Mendoza

Este movimiento territorial del gobernador se produce horas después de un encuentro clave con Cristina Kirchner, donde acordaron conformar una mesa de diálogo para intentar unificar listas ante las elecciones legislativas del 7 de septiembre. Según confirmó la Gobernación, el grupo —integrado por representantes de ambos espacios— buscará construir una estrategia conjunta, aunque fuentes cercanas aclararon que “no implica unidad sellada”. La reunión marca un acercamiento tras cinco meses de distanciamiento, impulsado por la necesidad de contrarrestar la alianza nacional entre La Libertad Avanza y el PRO, que amenaza con fracturar al peronismo bonaerense. “Una división condenaría a una derrota histórica”, advierten voceros del PJ.

Pese al gesto diplomático, las diferencias estratégicas persisten: mientras Kicillof fortalece su movimiento con plenarios en el interior bonaerense —incluyendo futuros actos en Coronel Suárez y la Quinta Sección—, Cristina Kirchner insiste en nacionalizar la campaña contra Javier Milei y considera “un error” el desdoblamiento electoral provincial. El lunes, el gobernador reunirá a sus 40 intendentes aliados —muchos críticos del liderazgo kirchnerista— para definir posturas ante la negociación, en un intento por consolidar su peso político. Con el cierre de listas previsto para el 19 de julio, la frágil tregua parece más una operación de rescate electoral que una reconciliación genuina, donde cada facción busca maximizar su influencia en la carnicería interna por las candidaturas.