Más de 30 sindicatos salieron a cuestionar este viernes el dato de inflación de enero, que el Gobierno de Javier Milei celebró como un logro. Según el INDEC, la inflación fue del 2,2%, la cifra más baja desde julio de 2020. Sin embargo, los gremios aseguran que este número no coincide con lo que vive la gente en su día a día. “El bolsillo canta claro”, afirmaron en un comunicado conjunto.
Los sindicatos, entre los que se encuentran la CTA, APSEE, SIPREBA y la Asociación Bancaria, sostienen que el INDEC utiliza una metodología de cálculo desactualizada. “El Gobierno no se atreve a modificarla porque revelaría que la inflación es mayor a la publicada”, denunciaron. Además, señalaron que expertos coinciden en que hubo un desfasaje cercano al 15% en contra de los salarios durante 2024.
La discrepancia entre los datos oficiales y la percepción popular no es nueva, pero ahora los gremios aseguran tener pruebas de que este desfasaje es real. “Hasta ahora era un comentario que se escuchaba en pueblos y ciudades, pero hoy podemos demostrar que es cierto”, advirtieron.
Diferencias entre el INDEC y la Ciudad de Buenos Aires
La controversia se profundiza al comparar los datos del INDEC con los de la Ciudad de Buenos Aires. Mientras el organismo nacional reportó una inflación del 2,2% en enero, la Ciudad registró un 3,1%. Esta diferencia, que históricamente era mínima, se ha ampliado notablemente: en el último dato disponible, la inflación porteña fue un 55% superior a la del INDEC.
El economista Juan Graña, investigador del Conicet, explicó que esta divergencia se debe a que el IPC de la Ciudad utiliza una canasta de consumo actualizada desde febrero de 2022, mientras que el INDEC aún no ha terminado de reformular la suya. Además, señaló que el IPC porteño le da más peso a servicios como vivienda, comunicación y educación, mientras que el INDEC prioriza bienes como alimentos, bebidas e indumentaria. Esto podría explicar por qué la inflación en la Ciudad parece ser más alta.
¿Inflación subestimada?
La demora del INDEC en actualizar su metodología ha generado sospechas entre economistas y analistas, quienes creen que el organismo podría estar subestimando el impacto real de la inflación. En un contexto donde los precios siguen subiendo y el poder adquisitivo de la población se resiente, la precisión de los datos es crucial para diseñar políticas públicas efectivas.
Mientras el Gobierno celebra el 2,2% como un avance, los gremios y expertos insisten en que la inflación real es más alta y que los números oficiales no reflejan la dura realidad que enfrentan las familias argentinas. “Los datos no coinciden con lo que sentimos en el bolsillo”, resumieron los sindicatos.
IPC INDEC vs IPC CABA
— Juan M. Graña 🧡💚 (@JuanMGrana) February 13, 2025
Ya casi todos saben que hay un debate metodológico respecto a cómo se mide la inflación en 🇦🇷.
Hoy salió el número del IPC INDEC nacional con 2,2% (en GBA dio menos: 2%)
Hace una semana salió el IPC CABA y dio: 3,1%
Mini hilo. 🧵