Milei hace jugar a Bullrich

La interna en el gobierno de Javier Milei alcanzó nuevos niveles de tensión esta semana, con la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, protagonizando un enfrentamiento público con la vicepresidenta Victoria Villarruel. El detonante fue la sesión del Senado que aprobó aumentos jubilatorios, moratorias previsionales y la emergencia en discapacidad, donde Villarruel condujo el debate sin oponerse a las iniciativas opositoras. Bullrich no ahorró críticas: “Ella misma sacó a la luz que la estrategia de cuidar el dinero de la gente […] los tira por la borda. Terminó diciendo la verdad: piensa igual que los kirchneristas”.

La réplica de Villarruel no se hizo esperar; le recordó el pasado militante guerrillera y cuestionó su coherencia política: “Todos los argentinos saben de qué lado estoy […] mientras usted pululaba de partido en partido”. Este cruce no es anecdótico, sino sintomático de una pulseada de poder más amplia. Fuentes cercanas al Presidente revelan que Milei busca contrarrestar la influencia de su hermana, Karina Milei, y del círculo ligado a los Menem, quienes dominan el armado electoral de La Libertad Avanza. Según un informe de LPO, el mandatario desayunó este domingo con Bullrich y difundió una foto, gesto interpretado como un intento de reposicionarla. No obstante, la ministra ha sido marginada de decisiones clave: fue excluida de la fusión LLA-PRO en Buenos Aires, y sus aliados —como los “radicales con peluca” liderados por Mariano Campero— fueron “barridos sin contemplaciones” por Karina . La relación entre ambas es tan tensa que, según un dirigente libertario, “Karina es la Presidenta” en los hechos, y Javier “rehúye el conflicto” con ella .

Bullrich negó negociar una candidatura durante el encuentro con Milei —”No se habló para nada de eso”—, pero analistas sugieren que la propuesta podría ser una maniobra para desplazarla de Seguridad y reemplazarla con Cristian Ritondo, enemigo acérrimo de la ministra. El trasfondo es la batalla por el liderazgo pos-Milei. Bullrich lidera encuestas como figura presidenciable, rivalizando incluso con el propio Mandatario, lo que alimenta recelos en Olivos. Villarruel, por su parte, apela a un discurso institucional: “Me votaron para defender la institucionalidad […] no para levantarme cuando las papas queman”, replicó a Bullrich . Pero la ministra insiste en que su posición es de principio: “Se necesitan gobernantes que estén del lado de las víctimas y no de los delincuentes”.