El Macri suplente reprime la vigilia en la casa de Cristina

En un operativo sorpresivo ejecutado en las primeras horas de la madrugada de este domingo, efectivos de la Policía de la Ciudad desalojaron a militantes que mantenían una vigilia frente al domicilio de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, ubicado en la intersección de las calles San José y Humberto Primo, en el barrio porteño de Constitución. El despliegue, que según fuentes oficiales involucró a más de 160 agentes, se inició pasadas las 2:00 AM y tuvo como objetivo remover estructuras como gazebos, sombrillas, parrillas, carpas y banderas instaladas sobre la vía pública por los manifestantes, quienes se encontraban en el lugar desde hacía más de cinco días en apoyo a la exmandataria. Las autoridades afirmaron que la acción buscaba “liberar el espacio público” y aseguraron que se desarrolló “sin incidentes ni represión”, tal como publicó Infobae, sosteniendo que simplemente “se limpió la zona y se fueron”. Sin embargo, testimonios e imágenes difundidas, incluso por la propia fuerza policial en redes sociales, mostraron un accionar violento durante el desalojo, contradiciendo la versión oficial y describiendo una intervención represiva que obligó a los militantes a retirarse, exigiéndoles en algunos casos identificación.

El operativo se produjo en un contexto judicial crítico, inmediatamente después de que la Corte Suprema de Justicia dejara firme la condena de seis años de prisión contra Kirchner en la causa Vialidad. Ante esta situación, la expresidenta, a través de su abogado Carlos Beraldi, solicitó formalmente al Tribunal Oral Federal 2 cumplir la pena bajo la modalidad de prisión domiciliaria en su residencia de la calle San José al 1100. En su presentación, la defensa fundamentó el pedido argumentando que “el contexto de seguridad personal y su rol institucional como exmandataria impiden una detención en una unidad penitenciaria común”, recordando especialmente el intento de homicidio que sufrió en septiembre de 2022. El escrito enfatizó que resulta “incontrovertible” que la pena “sólo puede ser llevada a cabo bajo la modalidad de detención domiciliaria”, ya que un establecimiento carcelario “no es compatible con los recaudos de seguridad que deben serle garantizados”. Además, solicitó explícitamente no ser sometida al uso de tobillera electrónica, alegando que cuenta con custodia oficial permanente.

La vivienda propuesta para el arresto domiciliario, donde reside junto a su hija Florencia Kirchner, ya fue inspeccionada por la Dirección de Control y Asistencia de Ejecución Penal. Los peritos concluyeron que el inmueble “reúne las condiciones necesarias” para tal fin, tras analizar el entorno, la circulación y las propiedades colindantes. De concederse la prisión domiciliaria, la expresidenta tendría prohibido salir de la casa, pero, según precisó Beraldi, “va a poder recibir a quien quiera y en principio en el horario que quiera, hasta inclusive podría dormir gente ahí sin problema”, salvo que el tribunal imponga restricciones específicas. Paralelamente, el TOF 2 solicitó a la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich – a quien se atribuye la decisión del operativo policial de desalojo según los primeros testimonios –, que presente posibles lugares en dependencias de fuerzas de seguridad como alternativa para el cumplimiento de la condena. Los nueve condenados en la causa Vialidad, incluida Kirchner, tienen plazo hasta este miércoles para presentarse ante los tribunales de Comodoro Py, fecha que la exmandataria ya confirmó que cumplirá.