En medio del duelo nacional por la muerte del Papa Francisco, Axel Kicillof mantuvo un encuentro con intendentes del conurbano cercanos a Cristina Kirchner. Los jefes comunales de Merlo, Lomas de Zamora, Malvinas Argentinas, Quilmes y Moreno participaron de una reunión en La Plata, enfocada en temas como el Presupuesto 2025, la Ley Fiscal Impositiva y la posibilidad de que la provincia solicite nuevo endeudamiento. Aunque desde el oficialismo se presentó como un repaso de gestión, el contexto político no pasó desapercibido: el peronismo bonaerense sigue dividido ante la pulseada por los plazos electorales.
La reunión tuvo un mandato claro de Cristina Kirchner: los intendentes llegaron tras acatar su orden de respaldar el desdoblamiento electoral propuesto por Kicillof, pese a que la ex presidenta inicialmente abogaba por elecciones concurrentes. “Después del gesto de Cristina, vinimos a conversar sobre cómo seguir adelante”, admitió uno de los participantes al salir de la reunión. Sin embargo, el diálogo también dejó al descubierto tensiones. Kicillof expresó su “preocupación” porque el Senado provincial no aprobó los cambios en los plazos electorales solicitados por la Junta Electoral, lo que complicará la organización de los comicios. Las fechas quedaron fijadas: reconocimiento de alianzas el 9 de julio, cierre de listas el 8 de agosto, presentación de boletas el 18 de agosto y elección general el 7 de septiembre.
La Legislatura bonaerense, con una oposición fragmentada y bloques oficialistas que no siempre alinean, será clave para avanzar en las iniciativas. El ministro Carlos Bianco admitió que no se logró modificar los plazos, lo que entorpecerá el proceso. “La ley actual complica la verificación de candidaturas”, reconoció, aunque aseguró que buscarán ajustarse a los tiempos nacionales.
El encuentro también incluyó a Sergio Barenghi (Bragado) y Francisco Echarren (Castelli), intendentes del Movimiento Derecho al Futuro, quienes reclamaron soluciones a temas económicos pendientes, como la paralización de obras públicas nacionales en territorio bonaerense. En respuesta, el ministro Gabriel Katopodis prepara un acto en la Universidad Nacional de San Martín para denunciar los “500 días sin obra pública” del Gobierno de Javier Milei, un evento que reunirá a intendentes de todo el país y amplificará el conflicto con la administración nacional.
Mientras tanto, las pintadas con la leyenda “Cristina 2025” en la Tercera Sección electoral, donde la ex presidenta podría candidatearse a diputada provincial, reflejan la presión de sus aliados. Gastón Granados, intendente de Ezeiza, publicó en redes la necesidad de que Cristina lidere la lista en su distrito: “Con su liderazgo construiremos la victoria”, escribió.
Aunque los elogios al Papa Francisco unieron discursivamente a los líderes peronistas, sus caminos políticos siguen paralelos. Kicillof intenta equilibrar gestión y negociación, mientras el kirchnerismo presiona por mayor influencia. La unidad, por ahora, sigue siendo un discurso sin traducción concreta.